Un estudio publicado en Nature revela que las superficies de la corteza de los árboles juegan un papel importante en la eliminación del metano atmosférico. Se ha descubierto que los microbios presentes en la corteza de los árboles pueden absorber metano, un potente gas de efecto invernadero, mucho mayor que el del CO2. Este hallazgo muestra que los árboles son más beneficiosos para el clima de lo que se pensaba anteriormente.
Los investigadores han demostrado que los microbios en la corteza y la madera de los árboles eliminan el metano atmosférico en una escala comparable o superior a la del suelo. Esto convierte a los árboles en un sumidero de metano tan importante como el suelo, o incluso más.
El metano ha contribuido aproximadamente al 30 % del calentamiento global desde la época preindustrial y sus emisiones están aumentando rápidamente. Si bien la mayor parte del metano se elimina por procesos atmosféricos, los suelos también absorben el gas mediante bacterias que lo descomponen para obtener energía. Sin embargo, ahora se ha encontrado que los árboles desempeñan un papel crucial en este proceso.
El estudio se centró en árboles de bosques tropicales, templados y boreales en diversas regiones, como el Amazonas, Panamá, el Reino Unido y Suecia. La absorción de metano fue más fuerte en los bosques tropicales debido a las condiciones cálidas y húmedas que favorecen a los microbios. En promedio, esta absorción añade alrededor del 10 % al beneficio climático proporcionado por los árboles templados y tropicales.
Mediante el análisis del intercambio de metano entre la atmósfera y la corteza a diferentes alturas, los investigadores encontraron que mientras los árboles emiten pequeñas cantidades de metano a nivel del suelo, a mayor altura, consumen metano de la atmósfera. Además, mediante métodos de escaneo láser, estimaron que la contribución global de los árboles a la absorción de metano es de entre 24,6 y 49,9 millones de toneladas.
Este estudio sugiere que plantar más árboles y reducir la deforestación son estrategias importantes para reducir las emisiones de metano. Los investigadores planean futuros estudios para entender mejor los microbios involucrados y los mecanismos de absorción de metano, así como investigar si la eliminación de metano por los árboles puede ser mejorada.

