Eva Ixchel Corcuera Gaztambide »
Las úlceras por presión son un tipo de lesiones que afectan a un gran número de personas dentro de los pacientes que permanecen largos periodos de tiempo encamados, así como personas que requieren tener inmovilizados algunos miembros de su cuerpo (por ejemplo, escayolados), pero especialmente prevalecen en los ancianos, que ven mermadas sus capacidades físicas y su movilidad.
Estas lesiones consisten en un debilitamiento del tejido de la zona corporal que se ve sometido a una presión prolongada en el mismo punto de apoyo (por ello afecta a personas con movilidad reducida). Es este apoyo prolongado sobre el mismo punto anatómico lo que provoca que el riego se vea disminuido, lo que viene a provocar la necrosis o muerte paulitina de esa parte de la anatomía. El proceso podría resumirse en los siguientes pasos; primeramente en la piel aparece un enrojecimiento o eritema, que dará paso a una ampolla de pequeño diámetro. Más tarde se presenta una herida como una incisión en la piel, para dar paso a una herida abierta que puede alcanzar dimensiones considerables, y que culminará con tejido necrosado llegando incluso a requerir amputar miembros, como en el caso de que la úlcera haya sido originada en un talón del pie.
Cuando la prevención ha fallado y se llega a estos casos extremos, las úlceras requieren de un tratamiento clínico de choque. En muchos casos las heridas se cierran y la piel vuelve a mostrar un aspecto casi intacto, pero en algunas personas estos tratamientos se realizan desde una acción paliativa, ya que carencias nutricionales como la falta de proteínas y características fisiológicas, como el envejecimiento o la incontinencia ralentizan o, incluso, impiden la curación.
En cualquier caso, existen, dentro de la industria farmacéutica, parches muy efectivos, desarrollados multidisciplinarmente, ya que son un compendio de tecnología de nuevos materiales, farmacología y otros ámbitos del mundo de la química, que adquiere en este tipo de productos una suma importancia a nivel cuantitativo y cualitativo dentro de la amplia gama de productos sanitarios.
Dentro de esta gama de pomadas y parches, hay un ingrediente que resulta fundamental para que pueda llegarse a la curación: los iones de plata.
Algunos parches terapéuticos actúan formando un gel que favorece la regeneración tisular y aportando iones plata a la herida, lo que hace que esta no se infecte, y en el caso de existir una colonia bacteriana, que esta vaya disminuyendo.
Los iones de plata tienen entre sus ventajas ser totalmente inocuos para el organismo; es una de las características que los hacen preferibles para la eliminación de colonias bacterianas frente al tratamiento con antibióticos, ya que estos últimos sí pueden implicar perjuicio para el organismo, además de acabar favoreciendo resistencia por parte de estos microorganismos.
La plata que presenta estas propiedades está en forma ionizada, Ag+ , ya que la forma no ionizada, Ag, resulta totalmente inerte.
Ya los antiguos fenicios conocían estas propiedades antimicrobianas, y almacenaban agua en cántaros de plata. Durante el siglo XIX se ponían monedas de plata en el interior de las botellas de leche para evitar su deterioro.
Para la industria química es relativamente sencillo producir nanopartículas de iones plata, cosa que se consigue mediante la síntesis en disolucion.
Actualmente no se conocen con exactitud estas propiedades, pero se investiga en el mundo de la química aplicada a la farmacia sobre este campo. Se cree que los iones Ag+ actúan inhibiendo las reacciones catalíticas de enzimas que requieren muchos de los microorganismos para reproducirse. Un ejemplo es la desestabilización de las paredes celulares de las bacterias en contacto con iones Ag+ . En los virus, la adhesión de las nanopartículas de plata a estos, provoca que estas estructuras no puedan insertarse en las células huésped, lo que no tarda en frenan la proliferación viral. Además de antibacterianos y antivirales, estos iones son también antifúngicos y muestran poder cicatrizante.
Podemos destacar que las nanopartículas de plata tienen un amplísimo espectro de actuación, además de resultar inocuas para aquella parte del organismo que se encuentra intacto o sano, lo que presenta una característica importante. Los iones Ag+ son, además de una importante herramienta en la lucha contra la enfermedad, un aliado respetuoso con el medio interno, lo que favorece que el organismo que se halla en el proceso de enfermedad, evolucione hacia un estado de homeostasia o salud.